EL PAN CRIMINALIZA EL VOTO DE LOS CIUDADANOS

Juan José Díaz Bermúdez

Oaxaca, México (Punto y Aparte).- De forma irresponsable el Partido Acción Nacional asumiendo un papel de paladín de la ética, la moral y las buenas costumbres, casi damas de la vela perpetua, criminalizó ipso facto al verse perdidos en las elecciones de Michoacán el voto de los ciudadanos, que cansados de la política violenta que el gobierno de Felipe Calderón adoptó en los últimos años, optó por otro partido, diferente incluso al  de la Revolución Democrática que por doce años gobernó ese estado.

Es preocupante que al presidente de México imprudentemente se le vaya la boca en un tema tan controvertido como es el del crimen organizado, diciendo que la mafia intervino para lograr el triunfo del candidato del PRI, Fausto Vallejo en su estado natal, Michoacán. Antes Luisa María Calderón la candidata perdedora y hermana del mandatario mexicano, había puesto en evidencia las elecciones, dejando entrever que habría sido el narcotráfico el causante de la derrota del PAN.

La postura del PAN es alarmante, incluso debe ser analizada esa posición en el Congreso Federal, debido a que significa sembrar dudas en procesos electivos que son custodiados por instituciones electorales, dejando en entredicho no solo a funcionarios de esas instancias, también al pueblo soberano,  al que tachan estar manipulado y guiado por delincuentes. Es decir para el PAN cuando gana, no hay vacilaciones, y cuando pierde siembra la duda  a través de industriales de los medios de comunicación, que en México se ha convertido en el negocio más redituable después del narcotráfico, la trata de blancas y el robo de carros. ¿Cuanto pagará el gobierno federal a Televisa y Milenio?

Llama la atención que desde una institución que suponen los ciudadanos tiene credibilidad y respetabilidad como es la Presidencia de México, digo respetable, aunque hoy se encuentrapresuntamente inmersa en rumores de alcoholismo e incapacidad mental, se divulgue por capricho, rabia e impotencia defendiendo a la familia Calderón, como es el caso de Michoacán, posturas infantiles; Tal es el hecho de hacer creer que fueron miembros del crimen organizado quienes lograron el triunfo del candidato del PRI, Fausto Vallejo. En la presunción de que así hubiera  sucedido, el apoyo habría sido a favor del candidato del gobernador en turno, es decir del PRD, por lógica los grupos mafiosos harían tratos con quién tiene el poder, no con quién llegará al mismo . Lo angustiante es que el mismo Calderón lo afirma sin pruebas de cargo que acompañen sus dichos con evidencias. El que acusa tiene el deber de probar, de no ser así, se es un calumniador, un corre ve y dile, lo que el pueblo conoce como un chismoso. La institución que representa el Presidente Felipe Calderón debe estar por encima de rabietas personales, dimes y diretes y acusaciones improbables, es más hasta de sospechas que se actúa presuntamente bajo los influjos del alcohol.

Las acusaciones que el PAN, Luisa María y Felipe Calderón Hinojosa hicieron sobre el triunfo del PRI en Michoacán, de ser ciertas tienen que ser probadas. México no se encuentra en estos momentos en condiciones para quedar ante los ojos del mundo como un país donde el crimen organizado impone candidatos.

Es claro que el PAN y la familia Calderón aparentemente tratan de de criminalizar el voto ciudadano, enviando el mensaje, que el ciudadano  que no vote por el PAN colabora con el crimen organizado. Así se promueve el terror, colocando lastres a la democracia que dicen vivimos en México. No se debe permitir que rumores perversos y tenebrosos sean esparcidos creando confusión. Hasta hoy el Partido Acción Nacional no ha demostrado que su dicho sea verdad, lo que quiere decir que fue un ardid usado comúnmente por grupos conservadores de ultraderecha, que como el PAN, son capaces de usar la mascarada de lucha que libra el gobierno federal contra el crimen, para enturbiar el proceso electoral hacía el 2012. Incluso con sus aliados en el gobierno de los Estados Unidos conspirar para una posible invasión norteamericana en suelo mexicano, argumentando que en nuestro territorio grupos terroristas internacionales se alían a criminales mexicanos con el objetivo de atacar al país del norte. Tengamos cuidado, en el PAN saben que perderán en el 2012. Los clericales de ese partido conservador, podrían fraguar con la ultraderecha de Estados Unidos un solo  pretexto para afianzar en México un gobierno de transición en caso que ganara el PRI o el PRD. Las elecciones de Michoacán es un ejemplo, ya lo dijeron sin probarlo, que el crimen estuvo detrás del PRI. ¿Qué más mentiras y pretextos faltan? En Estados Unidos lanzaron el buscapiés que grupos criminales de México colaboran con radicales árabes. Hace unos días un hispano fue detenido con el argumento que pretendía explotar bombas contra estaciones de policía y militares. ¿Qué trama Estados Unidos y el PAN? En conjunto lanzan mensajes que están dando perfiles que México podría ser una amenaza contra la seguridad del país del norte. El hecho que Calderón deje entrever que el narcotráfico estaría manejando los hilos de la sucesión al colaborar en elecciones, habla de un presidente de la república funesto, que pone no solo al país sino a todos los mexicanos en la mira de los grupos radicales de la ultraderecha del bélico vecino del norte.